I CAN'T GET NO...

El pasado 21 de Febrero, mientras los Rolling Stones desplegaban su show, la TV mostró una y otra vez cómo la masa descontrolada se manifestaba violentamente en las afueras del estadio de River Plate.
Sin embargo y paralelo a esto, dentro de la cancha se desarrolló otro episodio violento, que algún sector amarillista de la prensa, evitó que saliera al aire. Terminando la noche, en el momento en que Keith Richards acariciaba los acordes del clásico "Satisfaction", se vió a un reconocido periodista (casualmente del canal que televizaba el evento) sobresalir entre la multitud totalmente drogado. Si bien las cámaras evitaban enfocarlo, dominado por un estado de dureza absoluto, no paró de buscar la lente como un fanático más, dispuesto a demostrar su amor por la banda.
A la salida, se lo vió subir (ayudado por tres compañeros) a un vehículo de la línea 29, con una bandera y una cerveza de litro vacía y sin etiqueta. Un notero que intentó interrogarlo, afirmó que antes de entrar al micro, el periodista esbozó un "...andá la mierda, puto".